sábado, 24 de octubre de 2009

Stairway to Heaven .-



Abrí mis ojos con dificultad, la luz causaba un pequeño dolor en ellos. Aun adormecida lleve mi mano hasta mi cabeza intentando quitar mi cabello de mi rostro y limpiar los restos de saliva que estaban alrededor de mis labios. Cuando di por finalizado ese trabajo me senté en la cama intentando recordar como había llegado a una habitación con tantas personas que me parecían desconocidas y que además parecían estar en peores condiciones que las mías.

Como pude comencé a mover mis extremidades, sobre mis piernas dormía un chico de cabello platinado y delicados rasgos, a quien contemple unos minutos mientras intentaba sacarlo de sobre mis piernas.

Intentando no despertar a nadie camine por la habitación, ordene mi falda y me preocupe de buscar a alguien que me pareciera conocido. El no saber del lugar donde estaba me comenzó a angustiar.

Detuve mi caminar al verlo acostado en el suelo, su gorro estaba intacto al igual que sus gafas, sus ojos estaban placidamente cerrados y sus facciones relajada. Por unos instantes sonreí de tan solo observarlo, me parecía sumamente tierno verlo dormir, pero cuando recordé que de seguro el era el responsable de que estuviera hay camine hasta donde se encontraba, me arrodille a su lado y comencé a acariciar su rostro esperando que despertara, pero nada paso.

-Sid...Sid, despierta....

Era inútil, sus ojos continuaban cerrados y no había respuesta alguna de su parte y me comenzaba a desesperar.

-ho no, por favor....despierta.

Me alivie bastante al verlo abrir sus ojos, me sonrió aun adormecido mientras limpiaba restos de saliva de su rostro. Estiro uno de sus brazos atrayéndome hasta su cuerpo, sin reprocharle acomode mi cuerpo por completo sobre el piso de la habitación, apoye mi rostro en su desnudo y pálido pecho mientras el me abrazaba por mi cintura.

-¿Qué hacemos aquí?

Pregunte luego de unos segundos en esa posición.

-no...no lo recuerdo Annette.

-¿Qué?

-Eso...no se donde estamos.

Lo mire seria unos segundos esperando que sonriera y me digiera que todo era una broma, pero nada de eso paso.

Me puse de pie sin mucha delicadeza e intente caminar hasta la puerta pero sus manos sobre mi muñeca obstruyeron mi pasar.

-Estaremos bien, lo prometo.

-Sid.... ¿Que hora es?

-Deben ser cerca de... ¿Las ocho?

-Me van a matar....Sid, mi mamá.

Tome de su mano jalándolo para salir de la habitación. El intentaba buscar entre los jóvenes cuerpos adormecido su camiseta.

Cuando logramos salir de la habitación mi sorpresa fue mayor. Nos encontrábamos en la casa de Amy, una de las compañeras de clases de Sid que vivía a las afueras de la ciudad, lo que significaba que mi trayecto hasta casa tardaría más de una hora, lo que era una muerte asegurada esperando que el castigo que mi madre dictase acabara.

-¿Y que haremos?

-no...No lo se. Quizás deberíamos esperar que despertaran los demás.... ¿No crees?

-¿Puedes alguna vez hacer las cosas por ti mismo?

-¿Que quieres decir con eso?

-Quiero decir que eres un tarado, eso quiero decir.

Esperaba que por primera vez en su vida Sid hiciera algo solo por el, sin pensar en los demás, ni esperar que alguien actuase antes que el.

Sin siquiera esperar que reaccionase comencé a caminar hasta la puerta. No sin antes detenerme frente uno de los espejos de la casa. Mi aspecto era deplorable, mis ojeras eran inmensas sin mencionar mi maquillaje corrido y el olor a alcohol que salía por mis poros.

-Lo siento....

Musito con su tono de voz apagado. Movía sus pies y miraba de lado a lado, sin levantar la vista: Amaba verlo así.

-¿Sientes que?

-Siento ser un tarado...Ayúdame a no ser lo más.

-No eres un tarado....es solo que, a veces te pareces a uno.

-Muy graciosa.

No hizo falta más que me acercara a su cuerpo y besara mis labios para olvidar su falta de iniciativa.

Caminamos sin prisa hasta la estación de trenes. Caminar de su mano y observar los pastizales y el aire fresco de la mañana me parecía perfecto, no importaba cuanto tiempo estuviese castigada estaba obteniendo un hermoso regalo, caminar con el de la mano, no hacia falta nada más era por eso por lo que lo amaba.

3 comentarios:

  1. ahora creo que puedo comentar...puxis amiga, me encanta las fotos y para que decir de los cortos que escribes y subes en tu blog. Creo que lo que escribes o expresas dejan una enseñanza, me gusto la del niño autista y bueno para que decir que la de sid tambien me gusto. TKM.

    ResponderEliminar
  2. No gustarme qwue le pusieras Sid.. pero sabes que amo lo que escribes! te adoro valee!

    ResponderEliminar
  3. Ohhhhhhhh! Perdon por no haber pasado mucho, es que crei haberte dejado un comentario que decia que esta semana viene bastante movida para mi. Me encanta leer lo que escribes y creo que muchas veces deje claro que me encanta como escribes =) Espero nos volvamos a hablar. Ya es lunes y siento que una semana completa paso sobre mi =/

    Suerte y cuidate mucho

    !

    ResponderEliminar